Esta preciosidad tenía un dueño pero no tenía un nombre. Convivía con un mastín al que su dueño si se molestaba en darle de comer, a la voz de “Dino”… el pobre galgo aprendió a que esa era la llamada de la comida y ambos compañeros, galgo y mastín, pasaron a llamarse igual por pura necesidad. Tras mucho deambular, y varias casas de acogida anteriores dio con sus huesos en Asturias donde busca una familia definitiva.
Dino, de dos años y medio, es bueno, sociable con otros perros, tranquilo. Pasea genial con la correa y pide salir a hacer pis por las mañanas.
Informamos que no entregamos perros fuera de Asturias, preferimos gestionar la adopción personalmente y así poder ocuparnos de cualquier eventualidad que surja.
Si estás leyendo esto, vives en Asturias, y quieres adoptar a Dino, sólo tienes que rellenar el formulario pre-adopción aquí